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Cuando esta edición de Golf Los Lunes llegue a sus casillas de correo Tiger Woods estará en la Casa Blanca para recibir el más alto honor que un civil puede tener. El Presidente Trump decidió entregarle la Presidential Medal of Freedom, acto que se celebrará en el Rose Garden de la sede presidencial. Woods será el cuarto golfista en recibir ese honor luego que Charles Sifford, Arnold Palmer y Jack Nicklaus lo obtuvieran. El mundo Tiger quedó revolucionado luego de la victoria en el Masters y todos pensamos que esta semana que terminó estaría de nuevo en acción en el Wells Fargo Championship, pero grande fue la sorpresa cuando el viernes apareció la lista de inscriptos y su nombre no figuraba. Digo sorpresa porque Tiger tuvo siempre en su calendario este torneo, pero además porque era la última chance para jugar algo antes del PGA Championship. Enseguida empezaron las especulaciones sobre su estado de salud, máxime cuando apareció un video en donde se lo veía caminar con dificultad. Su manager, Mark Steimberg, salió rápido a desmentir los rumores diciendo que Tiger estaba descansando luego de su triunfo en Augusta y pasando tiempo con su familia. Lo cierto es que su barco, Privacy, ya llegó al Puerto de Oyster Bay ubicado a 13 millas de Bethpage y es seguro que allí vivirá durante el segundo major de la temporada, lo mismo que ocurrió el año pasado cuando se jugó el US Open en Shinnecock Hills. El yacht tiene 47 metros de eslora y una superficie de 590 metros cuadrados, que le permite albergar a 10 personas en 5 habitaciones, además de los 4 cuartos que tiene para los 9 tripulantes.